Siete de cada 10 personas necesitarán una residencia asistida en algún momento de su vida, según Consumo. Para los adultos mayores y sus familias, a menudo puede resultar difícil determinar el momento adecuado para trasladarse a un centro de vida asistida. No hay una respuesta correcta, pero hay señales que pueden indicar que hay que tomar algunas decisiones difíciles.
Sentimientos de soledad o miedo
A medida que envejecemos, la socialización no está tan integrada en nuestra agenda diaria como lo estaba cuando éramos más jóvenes. Esto puede conducir al aislamiento social, que también puede actuar como catalizador de otros problemas de salud, según el Instituto Nacional sobre el Envejecimiento.
¿Cómo puede saber si su ser querido se siente solo? Empieza por preguntarles. Además, busque signos de depresión, como desinterés por actividades que antes disfrutaban o cambios en los hábitos alimentarios.
Una de las ventajas de la vida asistida es la sensación de comunidad. Las clases de gimnasia, los grupos de aficiones y las salidas locales ofrecen oportunidades para conectar con otras personas y entablar relaciones significativas.
Dificultad para realizar las actividades de la vida diaria (AVD)
Se requieren habilidades fundamentales para cuidar de uno mismo, como comer, bañarse y desplazarse. Con la edad, estas actividades cotidianas pueden resultar más engorrosas. Según la Encuesta Nacional de Salud de Estados Unidos, aproximadamente el 20% de los adultos de 85 años o más necesitan ayuda con las AVD.
Para averiguar si su ser querido tiene dificultades con las AVD, preste atención a:
- Higiene personal: Determine si tiene dificultades para realizar tareas como bañarse, asearse, cepillarse los dientes o vestirse. El aspecto descuidado, el olor corporal o la ropa sucia pueden indicar posibles problemas.
- Pérdida o aumento de peso inexplicables: Si le cuesta preparar las comidas, podría estar comiendo demasiado poco o abusando de los alimentos procesados.
- Dificultad para andar, sentarse o levantarse de una silla o caerse: Son signos comunes de problemas de movilidad que requieren ayuda adicional para desplazarse.
Los centros de vida asistida ofrecen comidas recién hechas, servicio de limpieza, coordinación de la atención sanitaria y transporte para garantizar que su ser querido siempre tenga ayuda con lo que necesite, cuando la necesite.
No seguir el ritmo de la medicación
Según la FDA, los medicamentos no se toman según lo prescrito casi la mitad de las veces. La mala gestión de la medicación puede acarrear graves consecuencias, como el fracaso del tratamiento e incluso un mayor riesgo de muerte.
Los equipos de atención de los centros de vida asistida pueden ayudar con la gestión de la medicación. Esto elimina la carga mental de tener que recordar cuándo tomar cada pastilla y en qué cantidad, y tranquiliza a los familiares.
Caídas frecuentes
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), cada año se producen 36 millones de caídas de personas mayores en Estados Unidos. Una de cada cinco caídas provoca una lesión, como una fractura o un traumatismo craneoencefálico. Las caídas no son una parte típica del envejecimiento. Las caídas múltiples pueden indicar problemas de visión, movilidad reducida, deterioro del equilibrio, debilidad en la parte inferior del cuerpo u otro problema subyacente, todo lo cual puede comprometer la capacidad de una persona para vivir de forma segura e independiente.
En muchos casos, las caídas constituyen una señal crítica de que puede haber llegado el momento de plantearse el traslado a un centro de vida asistida. El apoyo adicional disponible en los centros de vida asistida puede ayudar a mitigar algunos riesgos de caídas, al tiempo que proporciona un entorno mejor adaptado a las necesidades cambiantes de las personas mayores.
Cómo encontrar la ayuda que usted o un ser querido necesita
Para aquellos que estén pensando en una residencia asistida, Miami Jewish Health ofrece ayuda con las actividades diarias, como bañarse y desplazarse por la comunidad con la ayuda de un acompañante. Las familias también tienen la tranquilidad de que ayudaremos a sus seres queridos con la gestión de la medicación y la coordinación de la asistencia sanitaria, garantizando que siempre haya supervisión de sus necesidades médicas. Las comidas preparadas por el chef, los grupos de aficiones y las salidas a lugares locales de Miami también ofrecen oportunidades inestimables para que los adultos mayores se relacionen con otras personas, entablen relaciones significativas y tengan un sentido de comunidad.
Para obtener más información sobre nuestro centro de vida asistida o concertar una visita gratuita, llame al 305.795.6180.