El consumo excesivo de alcohol puede provocar cambios estructurales y funcionales permanentes en el cerebro. En los últimos años, los investigadores también han estudiado la relación entre el alcohol y la demencia de aparición temprana. La demencia, un término amplio que engloba los trastornos que afectan a la función cerebral, puede causar pérdida de memoria, lenguaje y resolución de problemas hasta el punto de dificultar la vida cotidiana. La enfermedad de Alzheimer es uno de los tipos más comunes de demencia, y afecta a 6 millones de estadounidenses de todas las edades.
He aquí cómo el alcohol puede influir en el desarrollo de la demencia.
Beber en exceso podría aumentar el riesgo de demencia
Entre los casos de personas diagnosticadas de demencia en un estudio, el 16,5% de los hombres y el 4% de las mujeres presentaban trastornos por consumo de alcohol. Los investigadores definieron los trastornos por consumo de alcohol como “el consumo nocivo crónico de alcohol o la dependencia del alcohol”, informó la CNN.
Esto llevó a los expertos a concluir que el consumo excesivo de alcohol es el factor de riesgo de demencia que más se puede prevenir y, en particular, de los tipos de demencia que comienzan antes de los 65 años y conducen a una muerte prematura.
Pasar del consumo excesivo al moderado podría reducir el riesgo de demencia
Reducir el consumo de alcohol de excesivo a moderado disminuye el riesgo de demencia, según otro estudio de Corea del Sur.
De hecho, los bebedores empedernidos que redujeron su consumo a moderado experimentaron un descenso del 8% en el riesgo de demencia por cualquier causa. También tenían un 12% menos de riesgo de padecer Alzheimer, uno de los tipos más comunes de demencia.
¿Qué se considera beber “moderadamente”? Dos bebidas al día o menos para los hombres y una bebida al día o menos para las mujeres, según las Guías Alimentarias para los Estadounidenses 2020-2025.
Reducir el riesgo de demencia detectando el consumo excesivo de alcohol
La intervención precoz es vital para prevenir los daños cognitivos derivados del consumo excesivo de alcohol.
El primer paso es determinar cuánto alcohol consumen realmente usted o un ser querido. Llevar un registro es una buena manera de hacer un seguimiento preciso, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. Esto también le permite a usted o a su ser querido responder con mayor precisión a las preguntas de detección de abuso de alcohol durante las visitas anuales de bienestar.
Si usted o un miembro de su familia desean evaluar su consumo de alcohol y tomar medidas proactivas para reducirlo, esta prueba de detección de alcohol de los CDC es un buen punto de partida.
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El Instituto MIND de Miami Jewish Health es uno de los principales centros de investigación clínica sobre los últimos tratamientos para la enfermedad de Alzheimer. Como parte de nuestra misión de encontrar una cura, mantenemos sólidas afiliaciones con instituciones de prestigio como la Universidad Johns Hopkins y la Universidad del Sur de California. También colaboramos con las principales empresas farmacéuticas para impulsar los avances en la investigación del Alzheimer.
Bajo la dirección visionaria del Dr. Marc E. Agronin -experto reconocido a nivel nacional en la enfermedad de Alzheimer, los trastornos de la memoria y la psiquiatría geriátrica-, nuestros ensayos de investigación clínica emplean las metodologías más recientes y se guían por las teorías más prometedoras en este campo.
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