Instalar a los padres mayores en una residencia asistida puede ser todo un reto. Los cuidadores y los padres están sometidos a muchas emociones y presiones. El cambio por sí solo es difícil para muchos. El miedo, la ansiedad y las expectativas encontradas pueden exacerbar las reacciones de todos. Por maravillosas que sean, las visitas pueden contribuir a la angustia o sentar las bases para una transición suave y un futuro familiar sólido si se planifican bien.
He aquí algunos consejos para realizar visitas provechosas y enriquecedoras a una comunidad de vida asistida.
La primera visita es sólo un nuevo comienzo
Las primeras visitas con tus padres pueden resultar un poco incómodas. A algunos hijos adultos les preocupa que se les acaben las cosas que decir o las actividades que hacer. No deje que esto le impida visitarnos. Las visitas familiares son cruciales para todos los implicados. Es un nuevo comienzo, un momento de planificación, aprendizaje y adaptación. Pasar tiempo juntos y adaptarse a este cambio ofrece oportunidades para estrechar lazos, crecer, ganar confianza y ocasiones para simplemente relajarse y disfrutar el uno del otro.
Planifique su visita
Llame antes. Averigua cómo pasa el tiempo tu(s) progenitor(es). Pregunte en la residencia cuál es la mejor hora para visitarla. Los residentes se adaptan a sus rutinas, que pueden incluir comidas, actividades sociales, clases y momentos de tranquilidad. Asegúrate de que tu visita no sea una sorpresa y de que puedas reunirte con tus padres a la hora que más te convenga. Puede que se sorprenda gratamente cuando conozca los nuevos horarios sociales de sus padres mayores. Durante los periodos de distanciamiento social, el régimen de visitas puede cambiar con frecuencia. Ten un plan.
Estar presente y en el momento
Dedíquense el tiempo que se visitan el uno al otro. Eso significa nada de llamadas telefónicas, mensajes de texto u obligaciones innecesarias. Es tiempo para charlar, ponerse al día y reconectar. Si estás acostumbrado a confiar en tus padres y pedirles consejo, no dejes de hacerlo. Sentirse necesario es esencial.
Participar en actividades compartidas
Planificar la visita en torno a una actividad compartida es una forma estupenda de romper el hielo y mantener una conversación fluida y natural. Trae algunos objetos que sepas que interesarán a tus padres, ya sea un puzzle, un juego o nuevas fotos o vídeos familiares. Lo que os interese a los dos. Una tableta digital o un dispositivo móvil es una gran herramienta para conectar con otros miembros de la familia. Regálales a tus padres una tableta para mayores y ayúdales con FaceTime en familia. De nuevo, asegúrate de planificarlo con antelación. Querrás asegurarte de que la familia con la que te conectas virtualmente es consciente y está preparada.
Salir
A todos nos viene bien cambiar de aires de vez en cuando. Pregunta a tus padres si les gustaría hacer una breve excursión a un restaurante, centro comercial, parque, cine o museo de la localidad. Tal vez podríais asistir juntos a una representación teatral o musical en directo. Explorar juntos un lugar o un barrio nuevo puede ser muy divertido. Afortunadamente, estamos situados en el corazón de Miami, así que las opciones son infinitas.
Comunicar haciendo preguntas
Mientras visitas a tus padres, es un buen momento para conocer su nueva vida. ¿Cómo es? Averigua qué les gusta o disgusta a tus padres. Si tiene dudas o temores, asegúrese de ponerse en contacto con el personal y determinar el curso de acción adecuado. Haz preguntas sobre nuevos amigos, aficiones y actividades. Dedica tiempo a reunirte con sus nuevos conocidos y ayúdales a integrar vuestras vidas.
Caminar
Sal fuera. Salga a pasear. Aquí, en Miami Jewish Health, tenemos la suerte de contar con extensas hectáreas de jardines, zonas verdes y exóticas aves silvestres. Tome el sol o simplemente siéntese y relájese. Lee. Juntos, en voz alta o como más te convenga. Coman o merienden juntos al aire libre. Deja que tus padres te enseñen la ciudad.
Sea coherente
Intente planificar sus visitas con frecuencia y constancia. No hace falta que sean largas. Entre 45 minutos y una hora es un tiempo razonable. Cuanto más frecuente y repetitivo sea, más sabrán tus padres cuándo esperarte y todos tendrán una idea de la nueva norma.
No olvides llamar o chatear por vídeo. Las llamadas son tan importantes ahora como lo eran antes del traslado a la residencia asistida. Esos controles diarios son esenciales para todos. Tus padres no sentirán que se pierden nada si se mantienen informados y al día de todas las novedades familiares. Si tus padres necesitan ayuda con el videochat, programa una hora con el personal para asegurarte de que pueden conectarse.
Traer a los niños más pequeños y a los nietos
Llevar a sus hijos y nietos a visitar a su padre o madre puede ser una experiencia positiva y significativa para todos. Sus hijos suelen mantener activa la mente de sus padres con conversaciones divertidas y animadas. El tiempo con los abuelos no tiene precio, aunque haya días de bajón. Los niños aprenden de sus abuelos y viceversa. Puede ser una buena idea traer algunas actividades en las que los niños puedan trabajar con sus abuelos, como libros para colorear, libros de cuentos o incluso videojuegos para niños. Enmarca algunas de las obras de arte para poder exhibir con orgullo estos tesoros y recuerdos. Los niños más mayores pueden trabajar con rompecabezas y juegos de palabras, todos ellos buenos ejercicios para desarrollar la memoria y estupendas actividades para los mayores.
Sea positivo, paciente y comprensivo
¿Recuerdas cuando eras niño y había que recordarte que mantuvieras una actitud positiva? Bueno, ahora has cerrado el círculo. Es hora de que mantengas a tus padres positivos. Tu actitud, tus sonrisas y tu compasión marcan la pauta para tus padres. Incluso cuando estés frustrado o agitado, debes mantener una actitud positiva. Tus padres confían en ti y en tus respuestas. Su fortaleza, empatía y actitud positiva pueden marcar una gran diferencia. Mantente en el momento, y eso ayudará a todos a mantener los pies en la tierra.
Recuerda que lo más importante de visitar a tus padres es estar juntos, hagáis lo que hagáis. Si te mantienes en el momento, podrás estrechar lazos con tu progenitor y pasar tiempo juntos. Ayude a sus padres a vivir mejor y a ser más independientes, profundizando al mismo tiempo en sus relaciones familiares.
Si desea programar una visita a nuestra comunidad de vida asistida, Hazel Cypen Tower, llame al 305.795.6180.